Había sido un día ajetreado, llevaban días organizando la fiesta que tendría lugar esta noche. Las chicas habían pasado todo el día colocando adornos, muérdago, luces,... y los arbolitos de navidad. Había uno colocado en cada estancia común de la mansión; biblioteca, salón de baile, salón comedor, la salita de la primera planta... Pero el más grande era el del salón de baile que llegaba casi hasta el alto techo. Habían necesitado una escalera para colocar la estrella. Éste lo habían montado las chicas, se habían repartido el trabajo entre todas, colaborando en la colocación de todos los adornos, disfrutando con el trabajo entre risas y villancicos. El resto de arbolitos habían sido colocados por el servicio.
Después de asegurarse de que estaban enviadas todas las invitaciones, Val bajó a comprobar cómo iban los preparativos, le había encargado a Joseph que montaran la gran mesa en el salón de baile, y había pedido que colocaran otra a modo de self?service ya que el servicio tenía libre esa noche y el día siguiente. Estaba llena con aperitivos en decorativos platitos, variadas bandejas de ensaladas ocupaban todo un lateral de la mesa, cocteles cuyas copas estaban enterradas en hielo para mantenerlos fríos, fuentes de plata con carne cocinada y fuentes de pescado colocadas sobre expositores calientes para mantener el calor y tapadas con sus tapas de cristal labrado... Y a parte, en otra mesa larga, los postres; frutas, pasteles, tartas, helados en cubiteras especiales para mantener el frio, los típicos pasteles navideños,... y la fondue en forma de fuente de la que manaba chocolate caliente. La barra también había sido abastecida para la fiesta.
En el salón no quedaba casi nadie, sólo unos cuantos chicos del servicio terminando de montar la mesa. Supuso que sus hermanas estarían preparándose para la cena. Había invitado a Rehv y a Xhex y para su sorpresa, este año había aceptado la invitación, aunque Xhex había tenido que rechazarla. Rehv le había avisado que vendría acompañado de uno de los moros, aunque no le dijo de cuál de ellos. También había invitado a los hermanos y al tío de June, Savitar, y por supuesto, a los machos de la Reserva, como cada año. Había dicho a las chicas que invitaran a quien quisieran de sus conocidos más allegados.
Subió a su habitación para prepararse también, había elegido para esa noche un traje largo con escote palabra de honor, dejando su espalda y sus hombros descubiertos, y por supuesto, negro y ajustado a su cuerpo. Fue hasta el baño y se dio una ducha, se echó crema con aroma al perfume que iba a usar esa noche y se secó el pelo, haciéndose un elaborado recogido. Se maquilló discretamente y se colocó unos pendientes que le había regalado su padre hacía mucho tiempo. Se colocó unos stilettos acabados en una punta fina y comprobó su aspecto en el espejo del vestidor. Dándose por satisfecha, bajó a la primera planta esperando encontrar a las chicas ya preparadas. Y sobre todo, esperando que todo saliera bien.
Jecru ya estaba lista. Se miro en el espejo para darse el visto bueno.
Llevaba un vestido de gasa rojo, cogido al cuello y con un escote bastante pronunciado. La parte de atrás quedaba descubierta hasta el final de la espalda. Unas sandalias doradas, en las orejas llevaba unos pendientes de diamantes con forma de corazón y la gargantilla a juego. Era el único recuerdo que le quedaba de... No quería recordarlo, no podía soportar el dolor que sentía a pensar en el. Por eso odiaba estas fechas, siempre le hacía recordar a todos sus seres queridos que ya no estaban.
Volviendo a la realidad, siguió mirándose en el espejo. El maquillaje era sencillo, un poco de sombra dorada en los ojos y en los labios un toque de carmín rojo intenso. Y por último, lo que más le gustaba el cabello. Lo llevaba recogido y dejaba bastantes tirabuzones sueltos alrededor de su rostro, pero mezclado con los cabellos llevaba cadenas doradas de distintas longitudes, incluso llevaba dos que le llegaban hasta el trasero, y todas ellas terminaban e un diamante. Desde luego que parecía una de las diosas del Olimpo, pero para marcar la diferencia su vestido era rojo.
Salió de su habitación y fue hasta donde se celebraría la fiesta. Miro a su alrededor buscando a Val. Ya estaban casi todas sus compañeras, faltaban algunas y entre ellas las más importantes para esta noche, Las Trillys. Cuando encontró a la Ejecutora fue directa hasta ella.
?Todo está listo. Joseph se ha encargado de que desaparezca toda la ropa de las tres, y a cada una se le ha dejado un disfraz de Rey Mago.
En los labios de Val apareció una gran sonrisa, al imaginarse la cara del trió tequila cuando viese como tendrían que estar vestidas para la fiesta. Esta noche las Trillys se convertirían en los Reyes Magos de Oriente..... Melchor, Gaspar y Baltasar.
Vik bajo para la fiesta, estaba vestida con un traje de terciopelo rojo y vistas de peluche blanco de ayudante de Santa, el escote tipo V dejaba poco a la imaginación la blusa era muy ceñida y el cinturón negro en su cintura ayudaba también a estilizar mas su figura, la falda le llegaba a la mitad del muslo y llevaba unas botas negras que llegaban por debajo de la rodilla, y por supuesto su inconfundible gorrito de Santa Claus.
?Jojojo chicas, felices fiestas.?dijo Vik con una sonrisa
Se dirigió a una de las mesas y sacó de debajo de la mesa una caja llena de sombreros con muérdagos. Y se dirigió la puerta.
?¿Vik?
?¿Si, Val?
?¿Que hay en la caja?
?Hay unos sombreros que hice para los chicos y que nosotras definitivamente disfrutaremos.
?¿Y por qué no se los diste para que ellos se los pusieran?
?¿Y perderme la oportunidad de ponérselos yo misma y privarme de recibir los primeros besos de la noche? Ni loca. Ahora si me disculpas tengo sombreros que poner. Estaré recibiendo a los invitados?Vik le guiño un ojo a Val antes de dirigirse a la puerta.
?Vik ¿le hiciste uno a Qhuinn también??pregunto Jecrufe incrédula
Vik se detuvo en la puerta y miro a Jecrufe
?Iba a hacerle uno enserio que sí, pero el muérdago y los sombreros se me terminaron, una lástima la verdad. Por cierto si ven a Nita o Carmen les dicen donde estoy.
De nuevo la joven ejecutora se dirigió a la puerta. Cuando giro de nuevo y pregunto:
?¿Por cierto que le han hecho a las trilly? cuando baje escuche mucha conmoción en el cuarto de H.
?Ya verás cuando bajen?prometió Val
?A veces me das un poco de miedo Val. Bueno me voy, esta sexy y hermosa ayudante de Santa va a repartir sombreros de muérdago.
La oyeron cantar Jingle Bells mientras se dirigía a cumplir con su tarea.
Beth le puso el gorrito de papa Noel a Era que le había comprado hacia unos días, le dejaría la puerta abierta y sería ella quien decidiera bajar a cenar junto a ellas o no... Acabo su labor con el gorrito, y sonrió, llamaría sin duda la atención, tenía el gorrito rojo colocado por detrás de sus orejas enormes y un pompón en la punta del gorro.
Era empezó a mover la cabeza con intención de quitárselo.
?Era... si estas preciosa ?se acercó a ella y le colocó el gorro de nuevo. Le dio un besito en el hocico y la abrazó mientras la perra le devolvía el beso?Feliz navidad preciosa.
Se acercó al armario para coger su vestido y lo que se encontró fue un traje de Rey Mago, buscó bien la ropa por toda la habitación con una sonrisa puesta.
Al no encontrar nada más que ese... trajecito, cogió el traje y lo puso sobre la cama.
Se hizo un moño muy chuchurrido en lo alto de su cabeza. Se tenía que teñir de negro... Cogió el traje y lo puso sobre la cama. Soltó unas risillas mirándose al espejo y viendo la pinta que tenía con ese moño. Había invitado a Owen y a Graham, y además su abuela andará por aquí... Sabía que aunque tuviera que disfrazarse sería una de sus mejores navidades, en familia... Una lágrima recorrió su rostro al recordar las navidades en la casita del bosque cuando aún su familia estaba unida. Sus padres y sus abuelos cenando, todos juntos... Respiró hondo y cogiendo el tinte negro y a Era, salió disparada a buscar a D para bajar a la habitación de H a prepararse.
Iba a ser una noche larga y divertida, estaba segura de eso.
Cuando salió de la ducha contenta por estrenar su vestido azul noche que se había comprado con unas sandalias negras, al asomarse para ver si seguía en el vestidor, su boca se convirtió en un O enorme. Envuelta en una toalla como estaba, corrió hasta el vestidor tanteando las estanterías vacías. Bueno, no todas, en el perchero había colgado una bolsa con una etiqueta.
Acercándose, la tomo entre las manos y leyó en un susurro.
"Póntelo".
¿Qué? ¿Ponerse esto? Abrió la cremallera y una corona cayo a sus pies. Las habían estado diciendo que se iban a tener que disfrazar de reinas magas por esa noche. Ella se había negado, n le iba ponerse barba.
Pero... ¿donde estaba su precioso traje azul noche? Lo quería para ponérselo. Cuando no quedo otra y la puerta de su habitación sonó con un golpe, corrió hasta la puerta y la abrió. Beth estaba delante de ella con un moño en la cabeza.
?Aparta ?le dijo con un pequeño empujón H a B.
Corrió hasta las escaleras, en toalla solamente y cuando llego a las del primer piso, tomo aire.
?¡Malditas perras! ?Estaba muy cabreada ?Mas os vale que mi vestido este de vuelta u os juro que os convertiré en renos!!
?Hécate ?esta se giro y vio a Beth sonriente ?Vamos no es tan malo.
?Mmmm ?comenzó a andar hasta ella subiendo las escaleras. ?Claro no es malo tener que teñirse de negro, pero yo me tengo que colocar la barba. ¿Como te iba a molestar?
Agarrando el pomo de la puerta, abrió esta con un fuerte tirón que retumbo en toda la mansión. Andando a zancadas hasta el vestidor, vio que tendría que teñirse el pelo de blanco. Mirándose en el espejo, murmuro unas palabras y tanto como su pelo como la piel de Beth, se tiñeron del color que necesitaban.
?Te juro que esta me la pagan ?dijo H poniéndose el disfraz y mirando a la puerta donde había aparecido Dream también disfrazada.
?Bien reinas mías, bajemos a que se sienten en nuestras rodillas.
?Que diversión ?dijo sarcásticamente Hécate. ?Odio la Navidad ?susurro cuando pusieron un pie en la planta de abajo.
El estado de ánimo de Dream era incierto. Si ya estaba nerviosa por qué ponerse antes de ver que sólo tenía un puñetero traje de rey mago ahora estaba histérica. "Malditas, malditas..." cerró los ojos e inspiró hondo. El día en que iba a venir Gabriel y su padre y además estaría Nick...ese día. Una luz pasó por su cabeza y sonrió. Mejor así. Gabriel se reiría un rato, su padre la trataría como a una niña y Nick...Dios sabe qué le diría Nick. Pero por lo menos originalidad al máximo. No se puso ni la peluca ni la barba, se rizó el pelo y se maquilló naturalmente. Sería su muestra de rebeldía. El traje le quedaba un poco grande y largo, cortó con unas tijeras un poco el bajo y se lo puso de cinturón, ajustando la cintura. Luego bajó a la habitación de H, donde ya estaba Beth. Bajaron juntas abajo, donde unas cuantas las esperaban impacientes para reírse a gusto. Las tres lindas reinas magas sonrieron, hicieron pose y luego echaron una mirada seria, penetrante y sombría a Jecru y Val, que no podían aguantar la risa y se habían atragantado con el champán.
Beth sonrió y se colocó en el medio de sus trillys enganchando su brazo en el de ellas.
?Ahora que los machos están llegando vamos a coger una silla para cada una, las colocaremos allí ?dijo mirando el centro de una de las paredes del salón?Y haremos pasar uno por uno por nuestros regazos ?finalizó soltando unas risillas.
?Mmmm, me gusta la idea ?sonrió H.
?Sip, pero también a todas ellas ?bufó D mirando a las Ejecutoras que las miraban riéndose.
?Vamos ?urgió Beth.
Fueron a por unas sillas mulliditas y las colocaron donde habían dicho mirando de cara al público y sonriendo se sentaron una cada silla, mirando fijamente a Val y a Jecru que seguían riendo.
Beth se levantó y las miró con cara maliciosa.
?Bueno, ya que somos los reyes magos... Necesitamos saber qué hay en vuestras cartas de esta navidad... ?sus trillys asintieron?Y para no tener que leer tanto, hemos decidido que mejor nos lo digáis TODOS en persona ?se sentó y sonrió aun más?aquí, sentados en nuestros regacitos...
?Si ?dijeron sus trillys?Y, ¿quién mejor para hacer el honor que nuestra queridísima jefa? ?continuó H.
?Val... ?hizo una pausa, y miró a Jecru de Val?Jecru, tú también... Podéis ir pasando y eligiendo a vuestro Rey Mago ?finalizó D con una gran sonrisa en la cara, al ver la cara de sus compañeras.
Realmente estaban locas si creían que se sentaría en el regazo de alguna....
En ese momento sintió unas manos en su cintura y de pronto estaba echada encima de un hombro y su vista pegada al trasero de un macho.
?¿No pensarías escapar verdad??dijo Colin, mientras que el resto de los invitados de la fiesta reían a carcajadas
?Maldito estúpido....suéltame sino quieres que te mate.?
De pronto esta encima del regazo de Beth. Miro a su alrededor y Val estaba encima de D, y encima de H estaba..... Eros bastante feliz y tirándole de la barba. Los invitados de la fiesta estaban haciendo una cola esperando su turno para hablar con algún rey Mago.
?Bueno preciosa, espero que no le exijas mucho a Baltasar?el vampiro le guiño y con una carcajada se fue a la cola a esperar su turno, mientras que le ejecutora lo mataba con la mirada. Escucho un carraspeo y miro a Beth.
?Bueno Jecru, espero que este año hayas sido una niña buena ?comenzó a reír. Jecrufe paso de Colin a Beth su mirada asesina.?porque si no voy a tener que traerte carbón. A ver, dime ¿que quieres que te traigamos de Oriente?
?No quiero que me traigas nada, lo que quiero es que te lo lleves a él?dijo señalando a Colin y viendo como este continuaba riendo mientras la miraba?y lo dejes allí pudriéndose.
?No no no... Jecru eso no está bien. Estamos en fechas de Paz y Amor, y no puedes desearle nada malo a nadie... ?Baltasar seguía echando su discurso de paz y amor.
¿Que coño le pasaba a Beth? Le hablaba como si fuese una niña de 5 años. Desde luego que en que estaría pensando Val cuando se le ocurrió esta ridiculez. No estaba escuchándola hasta que oyó..
?.....así que he decidido traerte un macho que te eche un buen polvo para que te cambie el humor. Así que venga ya puedes irte que todavía me queda mucho trabajo por delante.
La levanto de su regazo y le dio una palmada en el trasero para que se fuera, dejándola boquiabierta.
?Bueno, querida niña, ¿ qué es lo que la nena le pide al rey mago de Oriente??dijo D sonriendo y acariciándole el pelo a Val como si fuera una niña pequeña.
?Dream, creo que te estás pasando...
?No no no...Yo soy tu rey mago, cariño. Pide por esa boquita...?Valnelia la miró de reojo y luego sonrió. ¿Qué más daba hacer de niña durante unos minutos, si obtenía el placer de ver a la trillys disfrazadas de reyes el día de Navidad?
?Mmmmm. Pues quiero que mis queridas discípulas se porten un poco mejor, que no tomen tanto tequila?la miró severa?ya que se me está acabando el presupuesto...Que los malos malotes nos dejen en paz durante un breve lapso de tiempo por lo menos...Que mi rey mago quite la mano de mi rodilla si no quiere que le llame acosador...?Dream formó una O perfecta con su boca y le pellizcó el culo a Val.
?Ho, ho, ho! Eso va a ser mucho pedir, querida niñita...así que espero que te valga con el saquito de chocolates que te dejaré...y alguna cosilla sin importancia más. Ala, ¡siguiente!
?Pero querido rey mago, eso del "ho, ho, ho" no lo dice Papá Noel? Él seguro que sería más amable conmigo..?Val se levantó y se alejó un poco de Dream, que se puso en pie con las manos en las caderas y se hizo la indignada.
?¡No me hables de ese gordinflón holgazán! Decir que es más amable que yo...¡Vergüenza tendría que darte, niña insolente!?al ver que las niñitas la miraban con caras asustadas, Dream maga se corrigió, puso su mejor sonrisa?Pero te perdono, cariño, sé que estás confusa y todo eso...te regalaré una bonita muñeca como recompensa de este ataque hacia la bola roja del polo?y le dio un besito en la cabeza a Val, mientras se sentaba en su silla serenamente, entrelazaba las manos y gritaba:?¡SIGUIENTE!
Mirándolo sonriente por primera vez que entro en ese salón, Eros estaba como un crio de cuatro años sentado en su regazo. Le tironeaba de la barba y esta hacia mohines cuando se la apartaba de su sitio.
?Bien precioso, si no paras los reyes magos te traeremos un saco de carbón agrio. Nada de regalito ?Eros comenzó a hacer pucheros.
?No no, yo soy un lindo bebe.
?Pues no lo parece, a ver... ¿Que quieres para el día de reyes? ?Guiñándole un ojo a Owen, Eros se acerco mucho a H y le metió el pelo, ahora blanco por un hechizo, detrás de las orejas.
Hécate aguanto la respiración. El traje le molestaba, ver a las demás arregladas con sus vestidos la molestaba. Ver como todo se reían, la molestaba, pero tenerlo a él cerca, no la molestaba.
?Quiero una gatita metida en mi cama todas las noches, desnuda y con una preciosa sonrisa que me dé cuando la mire. Vivir mil aventuras con ella y amarla hasta que desaparezca de este mundo ?le dio un pequeño mordisquito en el lobulo de la oreja que le calentó la sangre a la hembra. ?Ah ?dijo alzando la voz. ?También quiero sexo salvaje los 365 días del año.
Toda la sala comenzó a reírse. Hasta incluso la pobre reina que tapaba su boca con la mano.
?Mmm... No sé yo. Creo que tenemos el regalo indicado para ti. ?dijo con un guiño.
?Mejor que lleve un lindo lacito, si no lo devuelvo. ?gruño Eros como un niño pequeño.
?Tranquilo bebe, esta reina sabe cómo hacer felices a sus niños.
La sala volvió a estallar, y alguno comentarios como que Eros estaba bien seguro de eso llego a los oídos de ella. Sonriendo, le dio un palo de caramelo y sin querer, rozo su entrepierna y este ahogo un gemido. Estaba guapísimo esa noche vestido con su chaqueta y sin corbata.
?Eros, quiero que esto termine ?susurro muy bajito H.
?Y yo tesoro, deseo tenerte en ms brazos con un lindo vestido. ?la hembra se sonrojo.
?Eros, ya está bien, hay gente esperando ?exclamo Val con una risa.
?Bien señor rey, acuérdese de dejarme el regalo a los pies de mi cama, así cuando me levante lo encontrare.
Dicho esto, el macho salto de su regazo con una gran sonrisa. Ella suspiro y se obligo a sonreír.
?Bien pequeños y pequeñas, ¿quien es el siguiente?
Beth vio como Dream acababa con Val y no pudo evitar reírse. Val... Oh Val... Recordaría ese momento para toda su vida. Val jugando a ser una niñita por unos minutos, a todas les vendría muy bien.
Beth sonrió a los invitados y vio como Vik entraba en la sala vestida de "papá Noel".
?La competencia... ?le susurró Beth a sus trillys que enseguida se giraron para ver a Vik?Es mía babys... Continuad ?sonrió a Vik?¡Vik! Ven acá, dile a la Maga Beth qué regalitos quieres esta navidad.
?Beth... no pienses...
En el minutos siguiente, Beth cogía a Vik en cuello y se sentaba en su silla con ella en el regazo.
?Bien, ahora puedes decirme lo que quieres o puedes irte con una buena cachetada en ese culito redondo tuyo y con carbón debajo del arbolito el día de reyes niña... Tú decides... ?le advirtió Beth.
?Vale... Quiero...
Y Vik empezó con su larga e interminable lista de regalos que quería: que si unas botas y zapatos nuevos, PDA nueva, ropa... a montón, tampoco le iría mal una nueva tarjeta de crédito... etc etc etc.
Beth no tuvo más remedio que interrumpirla.
?Vik cariño, te conformaras con un paquetito con caramelos ?le dijo Beth dándole un beso en la frente?Pasa una feliz navidad y ten cuidado con ese Papá Noel me han dicho que abusan de sus enanos... ?le susurró antes de ponerla de pie y darle una nalgadita en el culo como había hecho con Jecru.
Estaba riendo ante las protestas de Vik, cuando Owen y Graham entraron en la sala, "Mierda mierda, van a verme con estas pintas" pensó Beth "¿Pero que más da? Se supone que lo tenemos que pasar bien, ¿no?", Owen sería el siguiente.
Le miró y mientras le sonreía le hizo un gesto con el dedo llamándolo hacia su regazo, el negó con la cabeza pero Graham le empujó y todo el mundo le vio dar varios pasos adelante. Si no quería hacer el ridículo sería mejor que fuera a Beth... Y así hizo.
?Buenas noches Reina Maga ?le dijo sonriente.
?Buenas noches niña, ven siéntate en mi cuello ?contestó ella tirando de su brazo para que la obedeciera antes de que se diera la vuelta y saliera corriendo de la Mansión.
Él frunció el ceño e hizo lo que Beth le mandó mientras escuchaba las risitas de las demás detrás suyo.
?Ignóralas, a unas ya les ha tocado y las demás no tardaran en pasar por aquí... ?le dijo Beth?Bien queridito, dime qué quieres para estas navidades...
Al ver que el macho se iba del regazo aprovecho y se subió Baltasar, decidió que era una buena ocasión para quedara con la ejecutora sin que nadie se lo pudiera impedir.
?A ver mi niño, ¿tú que le pedirías a los reyes magos? ?le pregunto la reina.
?Pues primero, que volviera a casa mi pareja?y enseguida le susurro ? de segundo quedar contigo para cenar y hablar de negocios.
?Que negocios ? le susurro la ejecutora.
?Cena conmigo y lo sabrás ?le intrigó él.
?De acuerdo dime, donde y cuando ?le dijo ella.
?Eso decídelo tu ? y le paso una tarjeta por debajo de la falda sin que nadie se diera cuenta ? llámame.
Entonces empezó a hablar en voz alta.
?Bien mirado, también me podrías conceder más trabajo?le pidió todo contento.
?Mas aun del que ya tienes, pero si te van a faltar horas, nada, nada, te concederé unos caramelos para que te relajes, que bastante falte te hace?le replico ella?ala el siguiente,?con eso se bajo y se unió a Ista que en esos momentos se bajaba de otra reina.
?Bien queridito, dime qué quieres para estas navidades... ?le dijo Beth.
?Es que verás... Conozco a una loba un tanto mandona ?empezó Owen mirándola maliciosamente?que bueno, me trae loco, ¿comprendes?
?Completamente ?le dijo Beth sonriente.
?Y bueno, nada sería mejor regalo que en una noche como hoy y la de reyes la tenga a mi lado mientras duermo... o... lo siguiente ?le susurró al oído seductoramente.
?Lo siguiente... ?le contestó levantando la ceja?¿Qué es lo siguiente?
?O lo anterior, como prefieras llamarlo.
Owen pasó su mano por detrás de la nuca de la hembra y empezó a acariciarla allí donde su pelo empezaba a nacer. Eso ponía cachondisima a Beth...
?¡Owen, quita esa mano de ahí! Estate quieto o lo que vas a tener en tu cama va a ser el palo de una escoba ?le gritó en bajito, regañándolo.
?Te llevaré conmigo esta noche reina ?le susurró?Sino... moriré ?dijo en tono telenovela.
?Por ser especialmente bueno con esa loba tuya, tendrás tu regalo Owen Shaferty... ?Beth le dio un beso en la mejilla y lo miró con grandes promesas en sus ojos.
?Te quiero pequeña.
Se levantó y se fue a saludar a Eros que estaba sonriente mirando a su trilly. Aquellos dos juntos... Qué peligro.
?¡La o el siguiente! ?gritó Beth.
Val observó a las hembras pedir una a una sus regalos a las improvisadas reinas magas, y también a los machos, aunque había uno que le llamaba la atención, no lo conocía y no le había visto nunca, y no sabía quién le había invitado, ni como había conseguido una invitación. Siguió observándolo un poco más antes de decidir qué hacer.
Cuando todos los de la sala habían pasado por los regazos de las reinas, las Trillys se levantaron de sus asientos y se acercaron a la barra para refrescar sus gargantas, pero Joseph fue más rápido, aun seguía allí para darles el recado antes de irse.
?Señoritas, sus trajes de fiesta se encuentran en sus habitaciones ?les dijo con una sonrisa en la cara, despidiéndose de ellas, salió del salón.
Val vio la alegría reflejada en el rostro de las tres jóvenes, y también las vio salir de la sala y correr en dirección a las escaleras. Esperó a que las jóvenes volvieran para dar comienzo la cena, se sentía hambrienta y con ganas de degustar los alimentos que les habían preparado.
Comprobó que todo siguiera en orden sobre la mesa; Joseph la había decorado con sumo gusto, velas encendidas, adornos florales y figuritas decorativas de navidad.
Dream llegó en un santiamén a su habitación y gritó de alegría al ver un vestido verde botella de palabra de honor, que acababa justo encima de las rodillas, dejando sus esbeltas pantorrillas al aire libre. Se puso unos taconazos negros y el pelo se lo dejó como estaba, ondulado. Después de darse unas pinceladas de maquillaje, bajó pletórica de alegría. Su padre y Gabriel ya estaban llegando, y este último estaba hablando muy animadamente con Owen y Eros. "Oh Dios mío" peligro a la vista. Su padre estaba charlando con Val, suponía que presentándose, aunque ella fue directa a comunicárselo a la jefa.
?Vaya transformación?dijo Val sonriendo y le pellizcó el trasero con sutileza?Este es tu padre, Adam, no Dream?
?Sí, Val?le dio un beso a su padre en la mejilla.
?Creo que voy a por una copa de champán, hija?dijo su padre justo antes de abordar a Joseph.
?Y ese de allí, Gabriel?Dream señaló hacia el espécimen que estaba hablando con Eros y Owen.
?Mmmmmm. Qué bien escoges, Dream.
?Habló la que los escoge feos. ¿EH jefa??le pegó un suave codazo en las costillas?Voy a ver qué traman esos tres...?se acercó lentamente a Gabriel y este se giró hacia ella, presintiéndola y recorriéndola con la mirada?Hola a los tres.
?Oye, Dream, ¿por qué no nos habías presentado antes a Gabriel??le preguntó Owen riéndose.
?Sí, ¿querías guardártelo para ti y que no te criticara con nosotros??siguió Eros, obteniendo una mirada furibunda de parte de Dream.
?No tuve ocasión. Y me da igual lo que digáis, panda de idiotas?dijo haciéndoles una mueca y sacando la lengua.
En ese momento sus trillys bajaban por las escaleras. "Menos mal, a ver si controlan a sus machotes" pensó Dream.
Ista recordó lo sucedido hacia un rato, había decidió sentarse en la reina maga y así acabar con la tontería y en vista de lo bien que se lo había pasado viendo a Val y a Jecrufe , había decidió subirse y empezar a pedir.
?A ver quiero tranquilidad, poder dormir y hacer bien mi trabajo, puede ser??le preguntó divertida.
?A lo mejor se puede con algo, pero no con todo?le dijo ella?mejor pide otra cosita, la niña no quiere nada más ?le preguntó
?Pues no, esta niña es muy buena y no hace cosas malas?le dijo.
?Seguro?le replicó?porque me han dicho que tienes novio, me dirás que no haces cosas malas.
?Pues va ser que no ? le replicó?es que todo lo que hago con él me gusto y eso no puede ser malo.
Poniendo cara de niña buena había mirado a toda la gente reunida que se estaba riendo, por lo que pensó que valía la pena ese rato subida allí, hasta que noto un pellizco en la nalga y le añadió.
?Pues eso está por verse, a mi esas cosas no me parecen tan buenas para una niña, para eso hay que ser adulta, tu ya lo eres lo suficiente? ?le preguntó con picardía.
?Supongo que algo si?le contestó?entonces que lo tendré todo.
?Todo lo que se dice todo, me temo que no?le dijo con naturalidad?pero te traerán una bolsita de sugus para que tengas algo de dulce, porque un dulce no amarga a nadie.
A esa altura la gente se estaba desternillando de risa entre las ocurrencias de la maga y se había bajado tranquilamente uniéndose en aquel momento a Baltasar, que también acababa de pedir su regalo.
Había sido divertido, pensó hacía tiempo que no se reía tanto en Navidad y Baltasar había estado en todo momento muy educado con la gente, con la única que no lo he visto hablar había sido con Val.
Pero donde esta ella, se puso a buscarla hasta que la vio y se fijo que miraba muy extraña a Baltasar, entonces se doy cuenta que ella no lo conocía y se encaminó hacia ella con Baltasar.
?Valnelia me parece que no conoces a Baltasar verdad? ? Le preguntó haciéndose la inocentona?como en la invitación ponía que podíamos invitar a la familia o amigos, mi opción era Baltasar o mi abuelo.
?Encantado de conocerla, mi peque habla muy bien de usted ? le dijo Baltasar muy educadamente.
?El placer es mío, pero Ista como no has invitado a tu abuelo??le preguntó mas inocentemente todavía.
?Eso me gustaría saber a mí también ? le dijo Baltasar a Ista.
?Eso mejor te lo explicó otro día, ahora asustaría a quien aparte de ti estuviera escuchando, además de desconfiar ? le informó con tristeza?seguramente hasta tu desconfiaras de mi.
?Bueno eso no es ningún problema ? le contestó Baltasar ? te vienes a casa y en paz, más tranquilidad para mí la verdad, estarás donde pueda protegerte bien.
?Para un momento?le contestó molesta Val?estás diciendo que está en peligro y no la podemos proteger bien?
?No, no quería decir eso, solo que preferiría que estuviera donde pudiera verla?le dijo en tono cameloso.
?Pues entonces, ningún problema porque este aquí verdad ?le indicó retándola Val.
?Ningún problema?dijo resignado Baltasar.
?Bueno pues entonces problema resuelto?dijo toda contenta Ista.
?No, no todo ?le replicó Valnelia?pero por ahora lo dejaremos estar, ya hablaremos tu y yo, por ahora divertíos y pasarlo bien.
Pero las dos ejecutoras se miraron pensativas, había muchas cosas por hablar y aclarar.